EL COLOR DE ESTE AÑO

Desde que ha comenzado el año 2010, muchos especialistas en decoración se han decidido a incorporar colores fríos y fuertes para crear un nuevo estilo en lo que se refiere a la decoración de interiores, y aunque muchas personas dudan de la utilización de este tipo de tonos, lo cierto es que se ha convertido en una verdadera tendencia en el mundo del arte decorativo.

En este punto, hay que destacar que si bien desde hace tiempo se han comenzado a utilizar colores como el naranja, el verde limón, e incluso el rojo, lo cierto es que la gran estrella de este año al parecer será el turquesa.

El inicio en la utilización de este color tan original en los ambientes de los hogares tuvo su origen a comienzos del 2010, cuando la empresa Pantone, compañía creadora del conocido sistema de control de colores para artes gráficas que lleva el mismo nombre, decidió, como cada año, que esta sería la etapa representada por el turquesa.

Ese ha sido el color elegido por varios motivos, pero principalmente por tratarse de un tono que nos permite agudizar nuestra imaginación y evadirnos de la realidad, nada mejor que en la actual época de crisis económica mundial.
El turquesa es una tonalidad muy bella y destacada, que siempre nos remite a la naturaleza, y sobre todo a los aspectos relacionados con el mar y las playas, por lo que ofrece una sensación de serenidad y frescura.
Esto es lo que han percibido los diseñadores más importantes del mundo, para en base a sus ideas innovar con la creación de espacios donde el turquesa invade nuestros sentidos.
Tengamos en cuenta que los colores fríos siempre han estado relacionados con sensaciones de bienestar y relajación por su gran influencia de naturaleza. La filosofía del Feng Shui, por ejemplo, asegura que los colores fríos poseen un efecto directo sobre nuestro estado de ánimo
Es por ello, que la idea de incorporar un poco de color en nuestro hogar, y puntualmente añadir accesorios en turquesa puede resultar muy beneficioso para nuestra energía, espíritu y por supuesto para la originalidad en el estilo de la casa.
Para quienes decidan introducir este tono en la decoración de los sectores de su casa, lo ideal es ir incorporando el color lentamente, comenzando quizás con algunos accesorios y adornos que le darán pequeños detalles decorativos a los espacio del hogar.
Con el tiempo, pueden irse incorporando elementos más destacados del ambiente en turquesa, como por ejemplo un buen juego de sillones con tapicería en dicho tono, e incluso un importante cortinado turquesa en los ventanales del ambiente central de nuestra casa.
Los más atrevidos, seguramente apostarán a crear verdaderos espacios naturales con este color, utilizando el turquesa para darle vida a las paredes, e invadiendo así los ambientes con la frescura y serenidad del mar.

En definitiva, sólo se trata de animarnos a crear espacios diferentes que resalten por su belleza y su originalidad.